Reflexión de Comunicación en la era digital

La comunicación forma parte importante de la vida diaria de cualquier ser humano, nos permite informarnos, relacionarnos y expresarnos. Con el paso de los años, esta ha ido evolucionando, así como también los medios que se utilizan. Al principio se comunicaban a través del lenguaje, la escritura y así fueron cambiando las cosas hasta llegar al correo, la imprenta, las telecomunicaciones, radio, telégrafo, televisión y teléfono.  Actualmente, vivimos ya en una era denominada como digital y todo se ha tenido que adaptar a ello.

En esta nueva etapa, la tecnología ha permitido que se pueda establecer una conexión en tiempo real con personas de cualquier lugar del mundo, mejorando la fluidez y eficacia de la comunicación.  Ya ahora encontramos vocabulario como redes sociales, videollamadas, mensajes de WhatsApp o Messenger, internet, entre otros. La mayoría de la población utiliza estos canales y van dejando de lado los antiguos. 

A continuación algunas ventajas de la comunicación en la era digital:

• El alcance que tiene con personas de diferentes lugares.

• Promueve una comunicación más fluida.

• Es de fácil acceso.

• Se manejan hipertextos, imágenes, videos y material visual.

Algunas desventajas que se pueden encontrar:

• El plagio y robo de los datos personales.

• La manipulación de información.

• Las prácticas de bullying y discriminación por las redes sociales.

• No todos poseen los aparatos necesarios para mantener la comunicación moderna.

  
  

De igual manera, como siempre ha sucedido, mantener una buena comunicación requiere de mucha responsabilidad. Esto debido a que la manera en la que se comparte la información y lo que se dice, llega a tener un gran impacto en la vida de las personas que toman esas palabras o datos.

A pesar de que hemos llegado ya a una era bastante revolucionada y moderna, el cambio nunca para, es por ello que también nosotros como personas y comunicadores nos tenemos que seguir adaptando. Es nuestro deber buscar la manera de llegar a nuestros públicos.